El Árbol de fuego (grevillea robusta), también llamado roble sedoso, roble australiano, roble plateado, pino de oro o gravilia, es un árbol originario de Australia.

Es un árbol de porte medio, pudiendo alcanzar los 20 metros de altura, y de crecimiento rápido.

Es de hoja perenne, pero si sufre sequía o heladas puede perder las hojas y volver a brotar en primavera.

Tamaño maceta:

Diámetro 25 cm.

Sustrato:

Como la mayoría de los árboles se adapta bien a todo tipo de suelos, pero se desarrollará mejor si lo plantamos en suelo suelto y bien drenado, y con una buena cantidad de materia orgánica.

El sustrato es muy importante para su crecimiento y buen desarrollo, por lo que tiene que ser de buena calidad. Recomendamos el Sustrato Universal Ecológico que lleva productos ecológicos y es de excelente calidad.

Riego:

Respecto al riego, es importante evitar los encharcamientos,  en cambio el árbol de fuego es bastante resistente a la sequía, por lo que es mejor que pase un poco de sed a provocarle daños al árbol por demasiada agua. Debemos hacer riegos moderados y espaciados en el tiempo, con regarlo 1 o 2 veces por semana en los meses de más calor será suficiente, el resto del año no será necesario regarlo a menos que pase mucho tiempo sin llover.

Luz:

Debemos ubicar nuestro árbol de fuego a pleno sol, le gustan los climas cálidos; no obstante puede llegar a soportar heladas de hasta -10ºC, es un poco sensible al viento por lo que intentaremos plantarlo un poco resguardado.

Abono:

El abono es imprescindible para que crezcan al máximo. Siempre es mejor uno orgánico como el Guano o Nitroflower.

Debe aplicarse una vez al mes, respetando siempre la dosis recomendada por el fabricante. Puede ser abono líquido, sólido o granulado. Recordando siempre que para plantas en maceta es más fácil controlar la dosis con abono líquido.

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